En días pasados me ha tocado cruzar el Puente de Vizcaya, es un puente que une Portugalete y Getxo. He dado un paseo por la parte alta del puente que está a 50 metros de altura y por abajo pasa el río. El suelo es de madera y se suele mover bastante y aún más cuando pasa la plataforma que cruza los coches de lado a lado.
Lo que me ha parecido curioso; es que cuando era niño, cruzaba un puente que estaría a escasos 3 metros y donde pasaba un arroyo muy pequeño. Ese era el puente que unía una zona de Santiago con la Cima. Recuerdo en ese entonces que cada que pasaba iba con un miedo de que se rompieran las tablas y tenía que ir agarrado siempre del pasamanos por que solo así me sentía seguro. En ocasiones en sitios altos solía tener vértigo.
Recuerdo que en la torre Eiffel sí que llegué a sentir un poco de miedo, por que hacía bastante aire y sentías casi como si fueras a salir volando. Pero me ha extrañado bastante que al cruzar el puente de Vizcaya no he experimentado el miedo, sino más bien una sensación de tranquilidad. Veía como alguna gente sí que le daba un poco de miedo cuando cruzaba. Pero ahí estaba yo con una sensación extraña, de esperar a que llegara el miedo; pero nunca llegó..
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