Resulta que un día cuando era un crío, nos había dejado solos mi madre en lo que se había ido a hacer las compras, nada de ir a la Comercial o a la Soriana, simplemente iba caminando al centro de Santiago a comprar cosas como carne, tortillas, tomates, y no se que tantas cosas mas para la cocina, bueno pues en esos lapsos que nos dejaba en casa, yo que siempre he sido un poco “langaro” recuerdo que no había cazuelas a las cuales meterle la cuchara, debí haber pensado algo como ahh pues si no hay nada ahora mismo me preparo yo algo, y puse una sartén en la estufa, y bien decidido a freír una tortilla al estilo de la que se pone debajo de los huevos rancheros, le puse aceite, y no recuerdo si llegué a echar la tortilla o no, pero lo cierto que en un descuido me cayó aceite hirviendo sobre la mano, que salí corriendo de la cocina y fui directo a meter la mano a una pila de agua., se me puso la mano como globo y me ardía bastante. Después cuando llegó mi madre, y como no solía ser muy cariñosa para decirme "a ver hijo que te pasó ven que te voy a curar" debió soltarme un "chamaco hijo de la chingada no te puedes esperar a que yo llegue" , claro que esto último lo estoy inventando, pero no debo estar muy alejado de la realidad conociendo a mi mamá … bueno pues después de eso creo que fue santo remedio para no acercarme a los sartenes durante mucho tiempo ..
Wednesday, October 30, 2024
La langares me mata..
Resulta que un día cuando era un crío, nos había dejado solos mi madre en lo que se había ido a hacer las compras, nada de ir a la Comercial o a la Soriana, simplemente iba caminando al centro de Santiago a comprar cosas como carne, tortillas, tomates, y no se que tantas cosas mas para la cocina, bueno pues en esos lapsos que nos dejaba en casa, yo que siempre he sido un poco “langaro” recuerdo que no había cazuelas a las cuales meterle la cuchara, debí haber pensado algo como ahh pues si no hay nada ahora mismo me preparo yo algo, y puse una sartén en la estufa, y bien decidido a freír una tortilla al estilo de la que se pone debajo de los huevos rancheros, le puse aceite, y no recuerdo si llegué a echar la tortilla o no, pero lo cierto que en un descuido me cayó aceite hirviendo sobre la mano, que salí corriendo de la cocina y fui directo a meter la mano a una pila de agua., se me puso la mano como globo y me ardía bastante. Después cuando llegó mi madre, y como no solía ser muy cariñosa para decirme "a ver hijo que te pasó ven que te voy a curar" debió soltarme un "chamaco hijo de la chingada no te puedes esperar a que yo llegue" , claro que esto último lo estoy inventando, pero no debo estar muy alejado de la realidad conociendo a mi mamá … bueno pues después de eso creo que fue santo remedio para no acercarme a los sartenes durante mucho tiempo ..
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment